Veterinarios escoceses lograron operar con éxito a una perra de raza Staffordshire que hace nueve meses se había tragado un pato de goma, de diez centímetros, que encontró en una piscina.
Según el diario británico “Daily Mail”, el dueño del animal, Nicolas Waters, que vive en la ciudad de Johnstone (Escocia), decidió llevar a ‘Jasmine’ al veterinario por los constantes chillidos que hacía, entonces los médicos recomendaron someterla a una operación, ya que el objeto le estaba obstruyendo el intestino delgado.
“‘Jasmine’ comenzó a vomitar, luego dejó de comer y parecía perder peso. Yo no me di cuenta que se había tragado el pato. No puedo creer que haya estado dentro de ella todo este tiempo”, dijo Waters
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