No es necesario pedir un milagro para mantener operativo un teléfono celular luego de caer al agua o haber tenido algún contacto con líquidos. A continuación le daremos los pasos que debe seguir para poder secarlo adecuadamente sin tener que apresurarse a hacer otros movimientos.
Lo urgente está en primero apagarlo y quitarle la batería; no intentar prenderlo bajo ningún motivo. Lo segundo está en quitarle el chip, dejándolo que seque solo. Hechas estas acciones, se sumerge las otras piezas en un vaso de vidrio lleno de alcohol (isopropílico, si es posible).
Después se escurren las piezas y se deja a secar en un lugar cálido (de preferencia al sol) sin usar secador. Ya acabado un tiempo determinado, se meten las piezas en una bolsa de sílice que absorben la humedad.
Para finalizar, envolverlo en un papel secador de cocina y métalo en una bolsa que se utiliza para congelar para que lo ponga en un horno a 100 grados durante dos minutos.
Lo urgente está en primero apagarlo y quitarle la batería; no intentar prenderlo bajo ningún motivo. Lo segundo está en quitarle el chip, dejándolo que seque solo. Hechas estas acciones, se sumerge las otras piezas en un vaso de vidrio lleno de alcohol (isopropílico, si es posible).
Después se escurren las piezas y se deja a secar en un lugar cálido (de preferencia al sol) sin usar secador. Ya acabado un tiempo determinado, se meten las piezas en una bolsa de sílice que absorben la humedad.
Para finalizar, envolverlo en un papel secador de cocina y métalo en una bolsa que se utiliza para congelar para que lo ponga en un horno a 100 grados durante dos minutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario